TRANSFORMACIÓN!!!

No sé que me pasa que siempre cuando llegan estas fechas primaverales me transformo, es como si me vampirizase, es una sensación extraña que me dura desde Semana Santa hasta pasado Septiembre, una vez que ya han concluído las BBC, es decir bodas, bautizos, comuniones y la ya mencionada Semana Santa, que es donde comienza el cambio, que por otro lado no está mal del todo, hay a quien le dá por las alergias a las gramineas, ¡Qué le vamos a hacer...!. Normalmente soy bastante participativa y activa en todos los campos y aspectos de la vida, pero hay algo innato, algo que me supera, que va más allá de mi raciocinio que me impide entender todo el circo religioso que se monta cuando llega Pascua, Cuaresma y otras parafernalias. Jamás entenderé esa mascarada que hace que la gente se engalane, se pasen días suplicando por el buen tiempo para poder sacar a las imágenes, se gasten dinerales en centros florares, que siendo prácticos los únicos que aquí se benefician son los de las floristerías, digo yo!, a menos que como es costumbre en los curas tengan concertado quién les surta, como suelen hacer con los fotógrafos en los demás eventos.
Hablando de fotógrafos, otra cosa que hace sea reacia a todo esto, es algo tan simple como no dejar nunca  que fotografiemos dentro de las Iglesias o catedrales,que siendo esta la casa del Señor...debería estar abierta y dispuesta a todo ser viviente,¿? sin embargo bien que venden postales o exponen las figuras cuando las sacan a dar el paseillo de ermita en ermita o de iglesia en iglesia, ahí si se  pueden fotografiar. ¿Por qué la gente pilla esas perras cuando ven un nublao?, digo yo que si es cuestión de fe no es necesario ponerse así porque llueva, mejor para las cosechas. Repito, si es cuestión de fe, ésta se puede profesar en cualquier lugar, o  no? ...
Cuando fui a vivir unas procesiones en Sevilla reconozco que me repelucaba al sentir la música acompañando los pasos de Semana Santa, que me sobrecogió esa procesión del silencio, quizás ahí me salió la parte católica, no lo sé bien, pero si sé que soy más romana y que para nada apostólica, por mucho que mis progenitores lo intentaron.
Ayer sin ir más lejos observé como fervientemente algunos parroquianos rezaban, adoraban algo que yo me creí una Virgen o un Cristo, pero no, estaban absortos ante una escalera llena de flores y velas y en lo alto una custodia de plata bajo un palio de oro que al parecer contiene la reliquia de ¡ vaya usted a saber!, jamás entenderé algo así, aunque pueda tolerarlo, jamás entenderé tamaña ostentoseidad(este palabro creo que ni viene en el diccionario) que viste a la Iglesia. Si la palabra de Cristo en sí ya es grande ¿para qué adornarla, exagerarla? y lo que es más triste, ¿para qué explotarla?, a qué ese enriquecimiento papal ¿por qué venerar imágenes ?, faltando así a la Biblia cuando ésta dice: "No adorarás imagen alguna".
Me resulta todo una contradicción más dura que pura!.